jueves, 15 de octubre de 2009
Cargada de emoción, la celebración comenzó muy temprano por la mañana. Cerca de las 7.30 la plaza del Área Fundacional se vistió de fiesta para recibir la réplica del cuerpo de San Juan Bosco. Hasta allí se acercaron alumnos del colegio que le rinde honor con su nombre, cantos, murgas y banderas. Luego de una misa en el establecimiento, la figura del santo sacerdote fue colocada en el centro de la iglesia del lugar, ubicada en la calle Córdoba, para que miles de fieles pudieran venerarlo.
Al igual que ocurrió en San Rafael, San Carlos y Las Heras, ayer los creyentes se fueron congregando en el templo de la Capital de Mendoza para demostrar la devoción que sienten por el religioso. La reliquia de Don Bosco ya pasó por Chile, el sur argentino y Buenos Aires.
Después viajó a Uruguay y otra vez volvió a nuestro país para pisar suelos santafesinos y mendocinos. Hoy llegará en peregrinación a la escuela vitivinícola de Rodeo del Medio, a las 8, luego habrá dos misas con alumnos secundarios y primarios; a las 14, será el horario de la veneración pública; mientras que a la tarde habrá dos misas más y a las diez de la noche comenzará la vigilia pública.
Una vez que deje la provincia, viajará rumbo al Norte. En total, las reliquias del santo visitarán 136 casas salesianas de todo el mundo, y recién llegarán en 2015 a su morada en Turín, Italia.
Es por eso que su presencia no pasó desapercibida en la iglesia Don Bosco. De la plaza del Área Fundacional, la figura fue cargada hasta el patio del colegio salesiano para que unas tres mil personas, entre alumnos, egresados, padres, docentes, preceptores y la comunidad escolar de María Auxiliadora de Capital y Luján de Cuyo, tuvieran la oportunidad de escuchar una misa y ver al santo de cerca. "Esta visita para nosotros es muy importante. Don Bosco es nuestro fundador, padre y santo. Muchos chicos lloraron, fue muy movilizante", explicó el padre Julio César Ramos, coordinador de la pastoral del colegio Don Bosco El cura Ramos contó que el hecho de que los restos del maestro de los jóvenes dejaran la basílica de María Auxiliadora, en Turín, se debió a la iniciativa del rector mayor de los salesianos, Pascual Chávez. Él tuvo la posibilidad de estar solo por unos instantes junto a la figura de Don Bosco en Italia, justo cuando estaban restaurando la urna de vidrio donde descansa. "Su experiencia fue tan fuerte que decidió compartirla con todos los salesianos del mundo", precisó el sacerdote Ramos.
Una vez que la reliquia ocupó el centro de la iglesia de Don Bosco, los mendocinos se fueron acercando para presenciar la réplica del cuerpo del religioso. Con lágrimas en los ojos, Esther Rodríguez, de Colonia Segovia, contó todo lo que significa el santo para ella. "Mi hijo estudió desde los 13 en el colegio Domingo Savio, en Córdoba, y estuvo a punto de ser sacerdote.
Después Dios le abrió otro camino, pero a partir de esa formación salesiana toda mi familia ha estado muy cerca de Don Bosco. Además, mis hijas fueron a María Auxiliadora, así que gracias a esta educación ellos ahora son buenos hijos y personas", expresó la mujer.
María Luisa Pescetti estuvo un largo rato cerca de la urna de vidrio mirando los restos del santo. Su hijo estudió en el colegio Don Bosco y hoy es preceptor del lugar. "Somos de la comunidad salesiana. Por eso, apenas nos enteramos quisimos estar presentes. Se trata de una oportunidad única, muy emocionante y movilizadora", destacó María Luisa.
Ernestina Paredes señaló que fue a ver la figura del santo "por la sencilla razón de que él era un creyente y hoy es un intermediario entre Dios y nosotros. Yo considero que todos los santos son un nexo para llegar a Dios, ya que es nuestro Padre el único que realiza los milagros".
Cuando tenía 12 años, Ana María Balirali iba todos los días a un oratorio de Uruguay, lugar donde nació, junto con su primo para ver películas de santos durante toda la tarde. "La obra de Don Bosco es maravillosa y no tiene punto de comparación con la de otros santos. Siempre tengo presente su recuerdo", manifestó la fiel.
También los alumnos del colegio Don Bosco fueron una pieza fundamental dentro de la celebración. "Para mí es un maestro y un acompañamiento. Acá, además de enseñarnos las materias comunes, nos hablan sobre la vida y las enseñanzas de Don Bosco. Esto es muy importante para nosotros", indicó Martín (13) de 8vo año.
El joven fue uno de los integrantes de la murga, que temprano por la mañana fue a la plaza del Área Fundacional para recibir al santo que llegaba del oratorio Ceferino Namuncurá, en Las Heras. Virginia Di Bari - vdibari@losandes.com.ar
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